La permanencia de José Limón

La permanencia de José Limón

Pocos conocen que pervive la compañía de danza Limón Dance Company, fundada hace setenta y cinco años por José Limón, bailarín y coreógrafo nacido en Culiacán, Sinaloa (1908-1972). Es un testamento viviente al valor duradero de sus esfuerzos por expresar el humanismo a través de la danza.

En diciembre pasado se grabó la presentación de dos de sus obras estelares – La pavana del moro (1949) y There is a Time (1956), que se han transmitido en el sitio del Joyce Theatre (Joyce.org). El nuevo director artístico de la compañía es Dante Puleio. Otras filmaciones de Limón están disponibles en YouTube. 

En 1913, la familia Limón emigró al estado de California, EUA. En 1927, fue a Nueva York a estudiar pintura, sin embargo, al asistir a la actuación de los bailarines Harol Kreutzberg e Ivonne Georgi decidió estudiar danza. Recibió clases de ballet con los más sobresalientes maestros de Nueva York, entre ellos Doris Humphrey y Charles Weideman. Con el tiempo llegó a convertirse en uno de los bailarines más importantes del mundo, al punto de crear una técnica propia que lleva su nombre. En París, formó parte del elenco de Ruth Page, imponiendo su talento en Les ballets americains

En 1940, formó su primera compañía, que abandonó al año siguiente para participar en la segunda guerra mundial, en el ejército americano. Tres años más tarde, organizó otra empresa dancística teniendo como directora de arte a Doris Humphrey. En esta etapa es cuando se convirtió en un gran coreógrafo. Creó La Malinche, La pavana del moro, Chacona en re menor, Los exiliados, Concerto Grosso y Danzas mexicanas, entre otras. Según sus propias palabras sus obras reflejaban la tragedia fundamental del hombre y la grandeza de su espíritu. 

En 1950, se presentó en México en el Palacio de Bellas Artes con su Compañía de Danza Moderna, después de recorrer triunfalmente América Latina, dentro de un programa del presidente Eisenhower para estrechar los lazos culturales. Al año siguiente regresó a México para trabajar como maestro y coreógrafo de la Academia de la Danza Mexicana en el INBA. Sus mejores alumnos fueron Valentina Castro, Luis Fandiño, Xavier Francis, Rocío Sagaón, Rosa Reyna y Nellie Happe, con quien montó las piezas dancísticas Tonantzintla, Los cuatro soles, Antígona y Redes. José Limón era muy reservado con su vida privada y sólo se supo que estuvo casado con Pauline Lawrence, que era diseñadora de trajes para danza. Limón dijo en México: La danza es el único idioma universal, y el primero en elocuencia por ejecutarse con el más noble de los instrumentos humanos: el cuerpo. En la actualidad, la Limón Dance Company monta sus coreografías permanentemente en Nueva York, ciudad donde murió el artista. En su natal Sinaloa, se celebra anualmente el Festival Internacional de Danza José Limón, en cuyo marco se entrega el Premio Nacional que lleva su nombre.

Fuentes: The New Yorker, sic.cultura.gob.mx

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